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Unos 200 mil técnicos requieren las empresas peruanas para el 2015

Las empresas demandan más personal técnico, por lo que urge formación de calidad en este campo. Se debe mejorar el sistema educativo en esta área.
Actualmente las empresas solicitan un 80% de técnicos para la producción y sólo 20% de profesionales para la dirección y planeamiento, según director nacional del SENATI. Construcción, minería y telecomunicaciones son algunos sectores con demanda. Gobierno alista reforma de educación técnica.
Christian Ninahuanca A.
Cada año más de 350 mil adolescentes a nivel nacional culminan su educación secundaria y deben decidir qué hacer para tener un futuro económicamente mejor. Seguir los estudios es lo más sensato, pero no siempre se escoge la mejor opción.
Muchas veces ingresan a las universidades optando por profesiones que están colapsadas (abogados y profesores) cuando la realidad del país requiere otro tipo de oficios, por lo que en los últimos años se ha revalorado la carrera técnica, que tiene y tendrá un mercado laboral favorable.
"Numéricamente la demanda de técnicos es mayor a la demanda de otro tipo de profesionales", sostiene Jorge Castro León, director nacional (e) del Servicio Nacional de Adiestramiento en Trabajo Industrial (Senati).
Pero, ¿cuántos y cuáles de estos oficios son necesarios? Según datos alcanzados por el Senati (que se basa en una encuesta del Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo) las empresas formales demandarán unos 200.728 nuevos técnicos en el 2015 (ver infografía).
"Según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), a la que estamos aspirando ingresar, lo que el mercado laboral requiere es 80% de técnicos y 20% de profesionales de dirección, planificación e investigación. Eso es verificable en realidades como la nuestra", afirma Castro León.
Tradicionalmente la economía peruana tiene sus puntales en la construcción, la industria, la minería y la agricultura, cuyas demandas laborales son constantes, a pesar de los vaivenes del mercado internacional.
Además con el Plan Nacional de Diversificación Productiva se promoverán otras actividades poco explotadas (acuicultura, industria de la madera y otros), que serán conducidas por una clase emergente de pequeños y medianos empresarios.
"Esto requiere de un buen contingente de técnicos especializados, que impulsen un crecimiento sostenible de la economía nacional", refiere el titular de Senati.
Aunque ciertamente lo que más se evidencia es la escasez de técnicos calificados para los niveles operativos, debido a que pocos jóvenes se orientan a estudiar carreras con creciente demanda laboral.
La educación técnica en el país está siendo subestimada por los jóvenes que no conocen las necesidades reales de las empresas. Ante este panorama las compañías contratan personal extranjero o incurren en gastos de capacitación.
Según las estadísticas la búsqueda de técnicos en el extranjero ha producido una inflación salarial entre el 15% y 25% (Amrop Perú, 2013). Solo en junio del 2014 ingresaron 4.153 extranjeros con visa de trabajo, 19% más en relación a junio 2013 (INEI).
"La educación superior técnica de calidad debe ser promovida entre los jóvenes como alternativa a la universitaria, ya que el mercado laboral demanda cada vez más personal especializado en carreras de este tipo”, añade Castro León.
Una de las razones de este problema es que hay una enorme cantidad de institutos, pero son pocos los que ofrecen formación técnica de calidad, siendo las más destacadas Senati, Sencico y TECSUP.
"Tenemos un gran número de institutos, pero hay poca vinculación entre lo que se enseña allí y lo que se necesita en el aparato productivo", afirma el viceministro de Gestión Pedagógica del Ministerio de Educación, Flavio Figallo.
DESFASE EDUCATIVO
Cuando se realizó la Primera Encuesta Nacional de la Juventud, publicada por la Secretaría Nacional de la Juventud (Senaju) en el 2011, se conoció que de los 8 millones de jóvenes peruanos, solo el 15,6% ha llevado estudios universitarios, mientras que el 14,6% ha tenido estudios superiores no universitarios.
El mismo sondeo indicaba que solo el 22,6% de jóvenes que están ocupados trabajan en lo que estudiaron, lo que revela un marcado desajuste entre las carreras que se prepararon y la realidad del mercado laboral.
"Han pasado más de tres años y todavía faltan los ajustes. Ese es el gran problema que tenemos en el país", dice Castro León.
El director de Asistencia Integral y Monitoreo del Senaju, José Montalvo, consideró que el Estado no ha tenido una política con respecto a este tema, por lo que es necesario establecer por dónde debe ir la educación superior y las prioridades en los planes curriculares de universidades e institutos.
"Los muchachos están estudiando derecho y administración, sobre todo en Lima, por lo que no van a tener el mercado laboral adecuado para lo que han estudiado", explica Montalvo.
Agrega que el 24% de los jóvenes ha estudiado una carrera técnica, pero de rden  administrativo, para los cuales es más complicado encontrar trabajo.
"En cambio quienes han estudiado carreras técnicas médicas (por las redes de hospitales y clínicas del país), los electricistas y operarios, son los que más oportunidades de empleo tienen", indica.
Por regiones
En tanto Jorge Castro sostiene que la profesionalización ya no se debe hacer por áreas del saber o por disciplina, sino por los requerimientos que tienen los puestos de trabajo.
Considera que los perfiles de carrera deben diseñarse según las oportunidades de empleo que hay donde se encuentran los institutos técnicos, tomando en cuenta las potencialidades que se manejan en estas regiones o zonas.
"En Chimbote (Áncash) tenemos una carrera sobre productos hidrobiológicos porque ahí está la industria pesquera. En Cajamarca comenzamos mantenimiento de maquinaria pesada porque hay minería. Es la manera como se deben diseñar las carreras", manifiesta.
Al respecto, el Senaju, en su última Guía de Orientación de Estudios, ilustra que entre las  carreras técnicas más estudiadas están las relacionadas con las ciencias físicas, químicas, matemáticas, estadísticas e informática.
En segundo lugar se encuentran las carreras relacionadas con electricidad,  ingeniería y afines.
POR SECTORES
En la minería hay una cartera de inversiones por US$ 60.938 millones en diversos proyectos para los próximos años, que permitirán recuperar la dinámica de este sector. Pero hace falta técnicos en metalmecánica, electricidad, topografía, mantenimiento y manejo de maquinaria pesada, manejo de explosivos y seguridad industrial.
También la construcción de obras de infraestructura (carreteras, puertos y aeropuertos), vivienda, centros comerciales y hoteles en el país, así como los proveedores de cemento, mayólicas, ladrillos y fierro, entre otros, precisan mano de obra intensiva de técnicos en concreto y asfalto, albañiles, carpinteros, electricistas, plomeros y especialistas en manejo de gas.
La expansión de las telecomunicaciones en el Perú presenta oportunidades laborales. Según un informe del INEI hasta setiembre del 2014, el 85% de las familias en el Perú contaba con celulares, el 26,6% disponía de teléfono fijo, el 35,7% tenía televisión por cable, y solo el 22,7% tenía internet en sus hogares, por lo cual este dinámico sector requiere de técnicos electrónicos e informáticos, así como expertos en redes, telemática y seguridad informática.
Estos son sólo algunos ejemplos, pues también hay buenas oportunidades en la agroindustria, textiles, sector energético y la industria de hidrocarburos.
Reforma de la educación técnica
Así como lo hizo con las universidades, el Gobierno prepara un proyecto de ley para mejorar los institutos tecnológicos. El Ministerio de Educación (Minedu) lo tendría listo a fines de febrero y lo enviará al Congreso para que sea debatido y aprobado.
- El viceministro de Gestión Pedagógica del Minedu, Flavio Figallo, dijo que se propondrá que los egresados de los institutos técnicos puedan realizar estudios de posgrado en las universidades.
- Destacó que en otros países los institutos tienen el mismo rango que las universidades y compiten unos con otros, lo que no significa que haya una igualdad en todos los niveles, sino que existe una convergencia.
- Agregó que lo que se busca con la reforma de la educación superior técnica y tecnológica es su fortalecimiento, para orientarla y vincularla con los sectores productivos del país.
CLAVE

A pesar de que en el 2014 la economía peruana creció alrededor de 2,8%, en los próximos años se tendrá un dinamismo mayor por las grandes inversiones en infraestructura, minería, agroindustria, energía y telecomunicaciones.

LA OPORTUNIDAD HISTÓRICA QUE EL “BONO DEMOGRÁFICO” LE DA AL PERÚ DEBE SER APROVECHADA
El “bono demográfico” tema sobre el cual comentó el señor Erick Rey de Castro, director de Colliers International, en una entrevista en Canal N es precisamente el tema central del estudio internacional El Dividendo Demográfico Sostenible: ¿Qué tienen que ver el matrimonio y la fecundidad con la economía? (SDD) elaborado por el Instituto de Ciencias para la Familia de la Universidad de Piura y otras instituciones.
Según Erick Rey de Castro el bono demográfico se da cuando una nación tiene la mayor parte de su población en etapa productiva o de consumo, entre 18 y 65 años. Esto sucede solo una vez en la historia de las poblaciones y normalmente coincide con la expansión de la economía.
Citó como ejemplo al baby boomer, suceso que tuvo lugar en Estados Unidos luego de la Segunda Guerra Mundial, cuando los soldados al retornar formaron sus familias y tuvieron hijos. Al crecer estos niños, y por tanto consumir, hubo una expansión de las industrias. Pues bien, Rey de Castro afirma que esto está sucediendo ahora mismo en el Perú por la predominancia de la población joven (cuyo promedio de edad es de 26 años), pero que es necesario que el entorno económico y político le de esa capacidad de consumo a la población para que se lleve a cabo esta explosión



Las declaraciones de Rey de Castro confirman lo planteado en el informe internacional SDD: la prosperidad de la economía moderna tiene relación directa con los niveles de fertilidad y calidad de estructura familiar. Según el informe SDD el matrimonio y la fecundidad son importantes para el desarrollo porque los sectores clase de la economía moderna —desde los productos del hogar a los seguros o la alimentación— suelen obtener más beneficios cuando las parejas se casan y tienen hijos.
Además, Rey de Castro comentó: “las armas para que esta población emergente tenga una mejor calidad de vida son: crecimiento sostenible de la economía con lo cual hay más ingreso per cápita, crédito (hipotecas para que puedan comprar viviendas) y también tarjetas de crédito para que puedan consumir más; así se tendrá más venta de viviendas por metro cuadrado y por ende se necesitará más puntos de venta”. El reporte SDD recomienda también la implementación de políticas públicas y corporativas para honrar los ideales de las familias trabajadoras, facilitándoles la flexibilidad para conseguir conciliar la vida familiar y laboral según sus necesidades.

"Bono demográfico" beneficiará a la región Arequipa
8 de Agosto del 2012 - 15:44 | Arequipa -
El Observatorio Socioeconómico Laboral (OSEL), explicó que Arequipa está rumbo a obtener el Bono Demográfico que se produce cuando la población con edades económicamente productivas (15 a 64 años) supera a los sectores de población con edades inferiores a los 15 años.
En este sentido, el Bono Demográfico debe ser aprovechado para impulsar el crecimiento económico, puesto que al existir una mayor proporción de trabajadores, se podrá acumular capital y reducir el gasto en personas dependientes.
Se estima que Arequipa, obtendrá el bono demográfico en el año 2025 y desde el presente año, esta característica se acentuará.
Por esta razón, se requiere una transformación de la población joven en una fuerza laboral productiva a través de la inversión en todos los niveles educativos, sumado a un fortalecimiento de las leyes, el mejoramiento en la eficiencia del uso de recursos por el gobierno y la reducción de la corrupción.

Este fenómeno se debe al cambio en la estructura de la población, puesto que según el INEI, se han reducido los índices de natalidad (Número de nacimientos por cada 1000 habitantes) en la región Arequipa, pasando de 22,7% en 1995 a 17,8% en el 2010.
Es hora de sacarle el jugo al bono demográfico, insertar jóvenes en el mundo laboral
Sabado, 25 de febrero de 2012 | 5:00 am

BENEFICIOS. González Prada decía: los jóvenes a la acción y los viejos a la tumba. Sin ser literales, hoy las grandes ciudades del Perú como Arequipa tienen una PEA joven sin oportunidades. 

María Eugenia Salas.
Arequipa desaprovecha una oportunidad de oro. Sacarle el jugo a su bono demográfico, un grueso de la Población Económicamente Activa (PEA) en capacidad de trabajar y cuyas edades oscilan entre 15 y 29 años. 
En la región mistiana, el 40% de la PEA tiene esa edad. Con la inserción o reinserción de esa mano de obra vital en el mundo laboral formal, se  elevarían los niveles de producción, productividad y competitividad. No solo contribuirían al crecimiento económico del país, también ellos mejorarían sus condiciones de vida. Además asegurarían su futuro generando ingresos para los fondos de  jubilación.
Este grupo en edad de trabajar  en las próximas tres décadas, mayoritariamente se convertirán en  carga social. Pasarán a ser trabajadores sin fuerzas a la espera de conseguir una pensión que les permita sobrevivir.
Grupos etarios
Existen tres grandes segmentos en el número de habitantes de Arequipa. El más grueso, siete de cada diez habitantes, son personas en condiciones de desempeñarse en alguna actividad.
El segundo grupo en importancia lo conforman menores de 14 años, dedicados casi en forma exclusiva a concluir su formación escolar. El tercero son mayores de 65 años que en muchos casos dependen de una jubilación (detalle infografía).
Tendencias en camino
El control de la natalidad que aplican las mujeres hace algunos años, redujo la población infantil en Arequipa, una tendencia que ocurre en el país.  Hace 60 años, las familias tenían en promedio siete hijos. Hace 30 se redujo a cuatro o cinco y actualmente la tasa de natalidad bordea 2.3 hijos en promedio, según estudios del INEI.
A esta tendencia se suma que cada vez la mujer retrasa más la llegada de un hijo. Primero quiere consolidar una carrera profesional.
Esto implica  que a futuro se irá reduciendo la fuerza laboral y ampliando el número de pensionistas que dejarán de contribuir a la producción, pero que necesitan de una mensualidad, después de haber trabajado 30 años. Es precisamente aquí donde encaja el bono demográfico.
 Rolando Fabián Camareda, director de Promoción de Empleo de la Gerencia Regional de Trabajo, analizó las cifras y tendencias. Advierte que si ahora los jóvenes no se incorporan en forma eficiente al mercado laboral, "perderemos la oportunidad de acumular reservas para atender la carga social"
Cifras de alerta
La situación se torna preocupante con el análisis de las cifras. De los 315 mil jóvenes en edad de aportar a la producción, casi 22 mil están desempleados y 105 mil, subempleados (ganan menos de lo que estipula la canasta básica familiar y no tienen beneficios sociales)
57 mil jóvenes no estudian, ni trabajan y en caso de no insertarlos a la fuerza laboral, más adelante serán una carga social tal como ocurre con muchos adultos mayores sin jubilación y que este gobierno intenta atender con pensión 65.
Cómo se le saca el jugo al bono demográfico. Rolando Fabián plantea que la capacitación es fundamental. Darles una buena formación profesional y técnica a los jóvenes para insertarlos en el mundo laboral. Que los institutos y universidades brinden carreras que demande el mercado laboral. ß
 ENFOQUE
Jorge Bedregal Analista
 La Educación es vital en este proceso
"Si lo que se busca es optimizar la inserción de los jóvenes al mercado laboral, lo primero que debemos analizar es que tan preparados están para desempeñarse con éxito en un empleo e ir alcanzando sus aspiraciones personales y favorecer al crecimiento económico del país.
Lo primero que debemos tener es información exacta sobre el tipo de trabajador que necesitan las empresas. Urge actualizar constantemente esta data. Además las instituciones educativas- no solo universitarias, sino también técnicas- deben preocuparse por innovar su oferta de formación. Hay que sintonizar con las necesidades reales del mercado laboral y que va cambiando constantemente.
Solo así podremos asegurar que los jóvenes contribuyan a la producción".